(Haga click para agrandar y leer la página)Los comisarios de Sociedad de Fomento han sancionado a Mauri Délcher junior con la retirada de la licencia para entrenar durante dos meses por no presentase a la firma de la toma de muestras para realizar el controlantidoping al caballo Kuwango, el 19de octubre de 2008, y ser reincidente en esta falta. Dos de los seis comisarios se mostraron en contra de la resolución proponiendo sólo una sanción económica.
Llama la atención la severidad de la sanción, pasando por encima del criterio del comisario instructor que propuso una sanción económica de 2.000 euros y la demora en notificarla, nada menos que cinco meses después de abrirse el expediente. No recordamos un caso en el que hubiera tanta disensión entre los jueces de la Sociedad, habitualmente proclives a tomar sus decisiones por unanimidad. De los seis comisarios actuantes,únicamente tres son abogados, a los que se les supone un mayor celo y rigor técnico en la aplicación de las normas. Curiosamente, los señores Javier Lacosta y César Guedeja, los comisarios discrepantes, son abogados. Por otro lado, es difícil de entender cómo en ocasiones se han impuesto multas por casos de doping que siempre adulteran el resultado de las carreras y esta vez es un asunto que no deja de ser -aunque sea reincidente- más que un trámite administrativo sin consecuencias deportivas, se establezca una pena de retirada de licencia.
Los comisarios han considerado que Maurcio Délcher junior cometió una falta muy grave para la que el Código de Carreras establece multas de 1.000 a 6.000 euros o la retirada de la autorización para entrenar por un plazo de entre seis meses y un año. El Código en ningún caso contempla la sanción de dos meses sin licencia impuesta al preparador de Bannaby. La sanción para una falta siempre debe estar contemplada en la norma. Da la impresión de que es una sanción diseñada a demanda, al margen de los hechos.
El campeón de preparadores lleva tiempo mostrándose muy crítico con la Sociedad de Fomento y parece como si se le hubiera querido pasar factura con una sanción desproporcionada. La sanción le puede crear un importante quebranto profesional a Mauri Délcher, aunque en buena lógica debería ser desactivada por los recursos presentados pero, por encima de cualquier otra consideración, daña a la Sociedad de Fomento, que en un proceso de continuo deterioro aún pierde más credibilidad con decisiones como ésta, cuando debería ser el referente que guiara nuestro turf con su buen hacer. Próximos los comicios para elegir su nueva Junta Directiva, es necesario que todo cambie para que nada siga igual.
(Reproducción autorizada por JD y A Galopar)
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